A propuesta de los Ministerios de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, el Conejo de Ministros aprobó el pasado día 26/06/2015 el Real Decreto 538/2015 por que el que se pretende realizar una regulación de los estudios y análisis comparativos de productos alimentarios.
El objeto de este decreto es regular los procedimientos e instrumentos utilizados para la elaboración y comunicación de estudios, informes y análisis comparativos sobre productos alimenticios dispuestos para su venta al consumidor final, destinados a su publicación o difusión para información del consumidor.
La publicación de ese Real Decreto viene a reforzar la defensa de los consumidores, y pretende mejorar la información y la capacidad de elección de todos los usuarios.
Este Real Decreto, además de dar cumplimiento al mandato recogido en la Ley de medidas para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria, garantiza el rigor de dichos estudios aportando, a su vez, seguridad jurídica a las empresas estudiadas.
Para lograr estos fines se ha establecido un procedimiento claro, preciso y normalizado, al cual se atendrán tanto los elaboradores del estudio como los operadores sometidos a estos (responsables del producto cuyo nombre o razón social, y dirección aparece en el etiquetado), en particular en lo referente a la toma de muestras de los alimentos en los puntos de venta al consumidor, y los correspondientes análisis practicados, en base a los cuales se publican las conclusiones.